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NOTA A EMPRESAS: PLAN DE ACCIÓN
Conviene recurrir a un plan de contingencia, si no se tiene, hay que hacerlo urgentemente, aunque sea convocando al comité directivo online y de inmediato, es importante valorar y prevenir los riesgos.
Es fundamental que todas las empresas, ya sean grandes, medianas o pequeñas, dispongan del plan de contingencia, detectando riesgos y ajustando medidas para responder y limitar las consecuencias.
En las empresas más vulnerables (sector turístico, restaurantes, hoteles…), promover la alerta de una posible insolvencia a través de un “test de solvencia”. Este test debe señalar al deudor en qué punto se encuentra con respecto a una situación de insolvencia a través de una serie de elementos objetivos de cumplimiento (cuotas de seguridad social, pago de impuestos, nóminas, días de pago a proveedores, etc.), y ver su evolución en el tiempo pasado.
El PLAN DE ACCIÓN sería:
- Actuar ¡Ya!, no gasto si no puedo vender, por lo que hay que tratar de reducir los gastos de inmediato. Tengo que asegurar mi liquidez.
- Revisar la tesorería y mi necesidad de liquidez, por tanto, si es necesario solicitar financiación a los bancos en una semana.
- Plantear bien el ERTE, revisar si conviene previamente despedir y hacer el ERTE con un número inferior a la plantilla actual. Si tengo que especificar cuánto tiempo durará el ERTE tirar para arriba porque no se puede alargar después, pero sí se puede acortar.
- Estudiar cómo continuamos nuestra acción comercial para cuándo volvamos a trabajar, o bien cómo la continúo si estoy teletrabajando.
- Sentarme delante de un folio en blanco y comenzar a eliminar gastos que he acumulado en el pasado y que sostenía porque la empresa iba bien.
- Revisar cuáles van a ser las consecuencias del cierre o pérdida de ingresos y analizar si los ingresos que ahora pierdo van a ser recuperables durante lo que restará de 2020, o bien si son pérdidas directas en mi cuenta de resultados.
- Revisar mi balance, revisar quiénes tengo de morosos y qué deudores tengo prácticamente perdidos. Si tengo existencias debería darles salida ahora mismo a cualquier precio.
- En cuanto a los precios en este momento, hay que mantenerlos, no se pueden bajar, no podemos hacer concesiones porque si las hacemos nuestro sufrimiento se alargará mucho en el tiempo y será difícilmente recuperable.
- Hacer una reflexión realista de toda la empresa, ahora tengo tiempo para pensar.